1734 Irañeta villa independiente del Valle de Araquil
toponimia
El 29 de mayo del año 1734 se
junta el pueblo (regidores, vecinos y concejo) y exponen que a las reuniones
del Valle de Araquil les toca ir hasta la ermita de Berasago, “como una legua
de camino poco más o menos” y con el mal tiempo y no haber muchas veces
conformidad, les acarrea el trámite serios trastornos, por lo cual han
“resuelto que el dicho lugar se aga y titule de villa con gobierno distinto y
separado e independiente del expresado Valle de Araquil”. Así, dan poderes para
que se solicite y “se sirva conceder al dicho lugar de Irañeta el título y
villa de Irañeta”; para ello ofrecen de “donativo a Su Magestad 500 ducados
pagados dentro de 20 días después de despachada la sobrecarta de la Cédula
Real”. Encargan los trámites a “Fausto de Egüés, procurador de los Tribunales
Reales”. Recuerdan que el Valle había pagado 700 ducados por la libertad de
nombrar alcalde. (AGN Protocolos Notariales, Notaría de Villanueva, Juan Yarza,
legajo 66 n.º 38)
Unos días
antes, el 22 del mismo mayo, había firmado los poderes a favor de dicho
procurador, Fausto de Egüés, con parecido texto de intenciones. (AGN Protocolos
Notariales, Notaría de Villanueva, Juan Yarza, legajo 66 n.º 34)
En la
solicitud oficial de escisión se repiten los textos acordados en el bazarre del
29 de mayo y dicen que “han resuelto el que dicho lugar se haga y titule villa
con govierno distinto y separado e independiente del espresado Valle de
Araquil, su alcalde, escribano, almirante y demás ministros de justicia y
también en lo que mira gobierno político apartando y exonerando de la conducta
de médico y boticario, que están conducidos en dicho Valle sin embargo de lo
actuado y sentenciado en su razón”; nombran representante para llevar a efecto
estos títulos o mercedes, con del donativo de 500 ducados, “pagados dentro de
20 días después de despachada la sobrecarta de la Cédula Real, que obtuviere y
fuere puesto en posesión y con llamamiento que hazen de pagar a Juan Francisco