Estella 1619 mayo o maya de la gente moza

Estella: 1619

Mayo o maya de la gente moza

            “Proceso contra Pedro de Beramendi, criado de Valentín de Azcona, cubero, vecino de Estella, preso sobre agresión con arcabuz y resultado de muerte accidental de Miguel Díez, criado de Pedro de Iturmendi, entallador, vecino de Estella”.

            El día 3 de mayo del año 1619 Juan de Irurzun, vecino de Estella, les manda a dos jóvenes, Pedro Beramendi y Miguel Díez, con una carta a casa de Juan García de Eulate, vecino de Gollano; en la carta “pidía un mayo para llevar a la dicha ciudad”. Margarita García de Eulate, de 20 años, explica lo ocurrido en su casa de Gollano: “los dichos mancebos hizieron traer dos pintas de vino y una tarja de pan y bebieron con sendas turradas cada dos veces”. Después se disponían a dormir sobre un banco y con una manta en la cocina, cuando “Pedro de Beramendi echó d

e ber a una escopeta, que estaba puesta en la cocina, donde estaban echados, y deziendo o qué lindo cañón, se lebantó y tomó en las manos mirando y encarando a la otra parte de la cocina, que fue a donde no había peligro baxó el gatillo y sacó centellas de fuego y no cebó y visto esto dixo el dicho Miguel de tal al dicho Pedro de Beramendi, para qué andaba de aquella manera con la escopeta, y el dicho Pedro de Veramendi, a lo que esta testigo tiene por muy cierto, entendiendo que como la primera vez no cebó, tampoco cebaría la segunda, lebantó de nuevo el gatillo de la dicha escopeta y encarando para el dicho Miguel de tal, dixo al dicho Miguel: Quieres que te mate; y el dicho Miguel le respondió, que no hiciese alguna locura y en este instante y punto el dicho Pedro de Beramendi bolbió a baxar el dicho gatillo y cebó la dicha escopeta y acertó a dar con ella y golpe de perdigones u de otra cosa al dicho Miguel en la boca, barba y oydo ezquierdos y le erió con rompimiento de cuero y carne y mucha efusión y corrimiento de sangre y dentro de una ora de tiempo, poco más o menos murió de la dicha erida.” (folios 3v-4)

            Pedro Beramendi, de 21 años, declara, ya preso en Gollano, el 4 de mayo de 1619, que: “Ayer, viernes, concertaron entre el defunto, este que declara y otros mancebos del Barrio del Mercado de San Juan de Estella, de venir a este dicho lugar de Gollano por un mayo, para poner en el dicho su Barrio y para esto acudieron a Juan de Irurçun, cubero, vecino del dicho Barrio a que les diese una carta de favor para Juan García de Eulate, vecino del dicho lugar de Gollano, y el dicho Irurçun les dio la dicha carta y vinieron con ella al dicho Juan García este que declara y el dicho Miguel, difunto, y después que dieron la dicha carta al dicho Juan García y él la leyó, dexaron las escopetas cargadas, como las trayan desde la dicha ciudad, arrimadas allí y bebieron con sendas tostadas cada dos veces”; sigue el relato con la versión de Margarita García. Era natural de Beramendi y fue llevado preso a Pamplona.

            Juan García de Eulate, vecino de Gollano, de 47 años dice que al anochecer del día 3, estando ya acostado, llegaron a su casa los dos jóvenes con la carta de Juan de Irurçun, “en que le pidían una maya para lebantar en la ciudad de Estella en el Barrio del Mercado, donde ellos residían”; después dice que el herido le perdonó a su amigo el grave descuido.

            El 24 de mayo del mismo 1619 declaran entre otros testigos:

“Pedro Martín de Iturmendi, ensanblador, vezino de la dicha ciudad (de Estella), que dixo bibía en el Mercado Nuebo de ella... de 33 años”; reconoce que Miguel Díez era criado suyo, natural de Cascante y que sus padres y hermanos vivían en Estella desde hacía 4 años y medio; estaba con él de aprendiz de “ensanblador”, aunque ya había cumplido con el aprendizaje: “el día de Santa Cruz, último pasado, que fue a tres deste presente mes, acordaron u determinaron los ombres mancebos, que residían en el Mercado Nuevo de la dicha ciudad, de traer un mayo, para ponerlo en el dicho Mercado, conforme se acostumbra y a acostumbrado poner otros años y se an puesto en este presente año, y para ello ansí el dicho Miguel Díez, difunto, criado de este testigo, como Pedro de Beramendi, preso en las Cárceles Reales de la ciudad de Pamplona, acusado de la muerte del dicho Miguel Díez, andubieron buscando dineros entre la gente moça del dicho Barrio, para ayuda de traer aquel, y haviendo recoxido alguna cantidad para el dicho efecto, dicho día, a lo que podían ser las siete oras de la tarde, partieron dicho muerto y acusado.” (f. 28)

            “Al otro día domingo, muy de mañana, truxeron el dicho difunto a la ciudad de Estella, y fue enterrado en la parroquia de San Miguel”, y tenía unos 20 o 21 años.

            Miguel Díez era hijo de María de Uterga, viuda de Alonso Díez, siendo sus hermanos Bartolomé y María Díaz, casada con Tomás de Cambra.

            Juan de Irurzun, oficial cubero, vecino de Estella, residente en el Mercado Nuevo, tenía 56 años, cuando escribió la carta para el de Gollano, solicitando el mayo.

            La muerte se consideró un accidente involuntario por todos los testigos, que así ayudaban a Pedro Beramendi; incluso la madre y los dos hermanos del difunto coinciden en ello y llegan a un acuerdo con el padre de Pedro, Juan Beramendi, y algunos fiadores, de socorrer a la familia con 50 ducados, en ayuda de todos los gastos de entierro y honras para el malogrado joven.

            Se dictó la primera sentencia el 5 de agosto de 1619, condenando a Pedro Beramendi en 3 años de destierro del Reino con costas; la segunda y definitiva se pronunció el 3 de agosto del mismo y, confirmando la anterior, añadía “la pena de omicidio”. (AGN Procesos.. COMPLETO PDF